El láser es una herramienta muy útil en odontología pues nos permite eliminar sin anestesia en muchas ocasiones tanto tejidos duros (dientes, hueso) como blandos (tejido inflamado de las encías) de forma muy precisa. Igualmente reduce las molestas vibraciones de la turbina lo que supone una gran ventaja para los pacientes con ansiedad y miedo a estos ruidos y vibraciones.
También es muy ventajoso su uso pues nos permite realizar tratamientos dentales a niños desde bien pequeños sin necesidad de anestesia e igualmente sin los molestos ruidos de la tecnología dental usual.
El uso del láser dental sustituye la utilización del bisturí, en muchas situaciones, permitiéndonos así la realización de cirugías mucho más limpias y sin suturas redundando también en beneficio de la cicatrización de los tejidos operados con postoperatorios mucho menos cruentos y minimizando el dolor y las molestias.
Gracias a la bioestimulación láser también es útil para tratar dolores musculares en las disfunciones craneomandibulares y en tratamientos para reducir la sensibilidad dental.
En resumen, el láser tiene infinidad de aplicaciones y ventajas en el ámbito odontológico entre ellos:
Sesión láser para tratamiento del dolor articulación temporomandibular